La Oktoberfest abrirá una cervecería sin alcohol

En la Karl-Stützel-Platz de Múnich se abrirá una cervecería al aire libre en los días previos a la Oktoberfest de este año, en un intento de frenar el comportamiento antisocial.

Uno sabe que las tendencias de consumo están cambiando drásticamente cuando una de las mayores celebraciones mundiales de la cerveza añade un espacio sin alcohol en el que los juerguistas pueden beber cervezas sin alcohol.

El local, llamado Die Nulle (El Cero), servirá exclusivamente bebidas sin alcohol a los visitantes durante el festival, que se celebrará del 21 de septiembre al 6 de octubre. Este año se celebra la 189ª edición del festival.

La decisión de abrir Die Nulle se tomó también en parte para intentar frenar el comportamiento antisocial antes y durante la Oktoberfest, cuando miles de aficionados a la cerveza acuden a la ciudad de Múnich para levantar una o dos... o tres jarras. La administración local decidió a propósito situar la cervecería sin alcohol en pleno centro de la ciudad para que estuviera "anclada en el centro de la sociedad".

Un restaurador dijo que la afluencia de turistas borrachos durante la fiesta de la cerveza se había vuelto "bastante repugnante".

"No queremos echar a nadie, sino recuperar el espacio público", afirma Florian Schönhofer.

"El verdadero problema radica en una cierta falta de límites en el consumo de alcohol, que hace 20 años estaba mucho más restringido a lugares señalados".

Según la página web oficial de la Oktoberfest, las tiendas de cerveza estarán abiertas desde las 9 de la mañana durante la fiesta, y las últimas cervezas se servirán a las 23.30. El precio oficial del litro de cerveza en la celebración oscila entre 13,60 y 15,30 euros, alrededor de un 3,87% más caro que el año pasado, cuando el precio del litro de cerveza era de 12,60 a 14,90 euros.

El año pasado, la Oktoberfest registró un récord de asistencia, con unos 7,2 millones de invitados que acudieron a sorber de sus jarras. Sin embargo, según los organizadores del festival, aunque la asistencia fue mayor que nunca el año pasado, el consumo de cerveza descendió, con unos 6,5 millones de litros de cerveza servidos en 2023, frente a los 7,1 millones de 2022.

Sin embargo, el comportamiento de los bebedores se consideró lo suficientemente problemático como para que este año se desplegara un grupo de trabajo municipal con el fin de alejar a las multitudes alcoholizadas de la estación de ferrocarril de Múnich y de los parques de la ciudad para hacerlos más seguros durante el festival.

Inauguración oficial

Die Nulle fue inaugurada por el alcalde de Múnich, Dieter Reiter, el jueves 18 de julio y permanecerá abierta hasta la fecha provisional del 15 de septiembre para fomentar una preparación pacífica de la Oktoberfest.

Los asistentes al establecimiento al aire libre y sin alcohol podrán llevar su propia comida, y habrá actuaciones gratuitas en directo de grupos musicales, coros y DJ. Se ofrecerán refrescos, cócteles, zumos, agua y cervezas sin alcohol a los sedientos visitantes.

La popularidad de la cerveza sin alcohol se dispara y las empresas de todo el mundo destinan una parte cada vez mayor de su gasto a esta categoría. La multinacional japonesa Asahi ha afirmado que en 2040 las bebidas sin y con poco alcohol generarán el 50% de sus ventas.

Por su parte, Athletic Brewing, la mayor cervecera sin alcohol de EE.UU., ha cerrado recientemente una ronda de financiación de 50 millones de dólares para impulsar su crecimiento a largo plazo y "seguir liderando la innovación en esta dinámica categoría en los próximos años".

Una investigación de la Universidad de Bristol indica también que la oferta de cervezas sin alcohol en los bares podría contribuir a "mejorar la salud pública", sin repercutir en los beneficios de los locales.